Para profundizar la atención integral de los creadores del país son impulsadas nueve líneas de acción orientadas a la salud, protección social y formación con las cuales la Fundación Casa del Artista ha logrado importantes conquistas en la dignificación, como sujetos de derecho, de quienes están al frente del hecho cultural, con alcances tangibles, como la obtención de la pensión de vejez y la acreditación académica de saberes.
Texto: AVN (Pedro Ibáñez)“La primordial conquista del artista y cultor en la Revolución ha sido existir, ser visible, ser jurídicamente considerado para el diseño de políticas. El cultor en revolución es sujeto de derecho”, resaltó en entrevista con la Agencia Venezolana de Noticias, la presidenta de esta institución, Lisett Torres, quien destacó la elaboración del Registro Socioproductivo de Artistas, Cultores y Creadores (Reseacc), línea matriz que desde 2008 funciona como instrumento científico para las estrategias de atención social dirigidas a los artistas.
Dicho registro es un instrumento de documentación que reúne hasta la fecha información de 14.500 creadores, con sus datos personales, de salud, vivienda y discapacidad. “Con eso tomamos acciones, y cuando vamos a cada municipio podemos saber quiénes están, qué necesitan”, explica Torres.
Esta herramienta fue creada conjuntamente con el Instituto Nacional de Estadística (INE) y funciona en los 23 estados y el Distrito Capital a través de los gabinetes regionales de cultura, que recaban la información con el fin de incluir a los creadores en una base de datos “que nos transmita la Venezuela cultural”.
“La atención social tiene que ver con la corresponsabilidad: si tú participas, yo puedo atenderte”, explica Torres respecto a la meta del registro,—contemplado en la Ley de Protección Social al Trabajador y Trabajadora Cultural integral (2013)— cuyos resultados han servido para consultar índices tales como población de mujeres, niños y jóvenes produciendo arte, e información demográfica de cultores atendidos en materia social.
Atención y protección social del artista
Sobre la base del Reseacc se trabajan las líneas orientadas a la protección social, como la Atención a la salud, que consta de ayudas económicas para tratamientos médicos, cirugía e insumos, —que en 2014 sumaron 180—, así como un servicio médico gratuito en la sede de la institución, en Caracas, donde se ofrecen consultas en medicina general, interna y psicología.
Paralelamente, en los 23 estados funciona la articulación con el Sistema Público Nacional de Salud para atender a cultores en caso de enfermedad o fallecimiento, además de las visitas domiciliarias en casos críticos y las jornadas médico-culturales Exprésate, a las que se sumarán en 2015 un plan de jornadas de medicina preventiva.
Para la promoción y defensa de los derechos, la institución dicta foros y talleres a nivel nacional para divulgar la legislación que protege la seguridad social de los artistas e igualmente se gestiona la solicitud de la pensión de vejez, —con el cumplimiento de los requisitos de edad y cotizaciones— que ha sido otorgada a 6.000 creadores.
Luego de la modificación del Artículo 6 de la Ley del Seguro Social Obligatorio (2012) con la cual los cultores tienen derecho a cotizar sin que sea necesario tener patrono, la Casa del Artista tramita ante el Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (IVSS) —previa solicitud formalizada por parte del artista— la cotización voluntaria como trabajador independiente.
Capacitación y motivación de los creadores
El registro socioeconómico también ha sido útil para la línea de Formación del artista, con el programa de certificación de saberes empíricos realizado conjuntamente con el Instituto Nacional de Capacitación y Educación Socialista (Inces) que en una fase piloto iniciada en julio de 2014, —dirigida a las parroquias caraqueñas El Recreo, San Agustín, San Bernardino y La Candelaria—, fueron acreditados 40 artistas con conocimiento en artesanía, iluminación, sonido y cocina tradicional.
Con esta prueba comenzó un plan que será extendido a las otras 19 parroquias de Caracas y los 23 estados, para otorgar certificaciones, de reconocimiento nacional e internacional, de los saberes definidos desde la experiencia de los cultores, quienes exponen ante un jurado que documenta la tradición, registra el saber y acredita al hacedor, explica Torres.
Con base en propuestas de colectivos culturales se realizan anualmente alrededor de 100 actividades formativas permanentes en danza, teatro, música y artes visuales en todo el territorio nacional, junto al Plan Intensivo de Talleres para niños y jóvenes, que en 2014 atendió a 1.300 pequeños, más el programa de Cátedras vivas, en el que se realizan cerca de 20 talleres formativos por año, dictados por artistas que son Premio Nacional de Cultura.
Estas actividades son “herramientas para que el conocimiento y práctica cultural comunal puedan llevarse a mejor término”, explicó Torres, sobre la capacitación que en 2015 incorporará diplomados en gestión cultural para líderes comunitarios, con el propósito de ahondar “en la investigación y documentación del proceso cultural que la comunidad ha venido haciendo ancestralmente”.
Junto a las otras líneas de acción Voz de los creadores, “Reconocimiento y motivación”, Activación de colectivos culturales, Apoyo a iniciativas socioproductivas y Recreación y esparcimiento, la institución constituye nueve ejes para la valoración del cultor y el artista.
“La revolución logró que el artista, creador y cultor venezolano sea sujeto de derecho, tenga beneficios igual que otro trabajador formal y sienta orgullo de ser artista”, expresa Torres quien afirma que el cultor en Venezuela es “garante de la soberanía cultural”.
Recordó que para 2015 esta prevista la creación en Caracas del Centro de Atención Integral del Artista, que contará con farmacia, consultorio, biblioteca, comedor público y habitaciones para hospedaje temporal, para continuar honrando compromisos en materia de seguridad social del artista.