No lo sabe, pero es la última vez que observará la ciudad de Manhattan desde el piso 34 de un rascacielos. Acaba de ducharse, su cabello gotea, está desnuda y su mirada se pierde en el paisaje de concreto. Ana contempla la vida a través del arte y viceversa. Las heridas, el desarraigo y la premisa del arte comprometido han guiado sus creaciones. En la cotidianidad, se relaciona con migrantes, muchos de ellos provenientes de Cuba, la tierra que nunca salió de ella.
Texto: Claudia Hernández / Foto: Roiner Ross
Con estas imágenes, la obra “Ana: la gente está mirando la sangre”, presentada por la compañía La Franja Teatral, procedente de Cuba, capturó la atención de los espectadores este martes 15 de abril, durante su estreno en el Festival Internacional de Teatro Progresista (FITP) 2025. Con una perspectiva de teatro documental y enfoque multidisciplinario, la puesta en escena honra la vida y obra de Ana Mendieta, una de las artistas cubano-americanas contemporáneas más influyentes.
“Para nosotros, esta obra, como género, es un entrenamiento burial y el título se inspira en una de las obras esta artista, líder del performance, una pensadora desde su arte, desde el concepto de tierra, desde el concepto de una Latinoamérica femenina, desde una mirada femenina del arte”, indicó la autora y directora de la pieza teatral, Angieska Hernández.
Hernández explicó que realizar un espectáculo donde conviven la perspectiva documental con varias disciplinas del arte ha sido “un disfrute total” para todo el equipo de trabajo. Señaló que los contenidos sociales abordados en la obra se extienden a los artistas para transmitir al público “una proyección latinoamericana, un sentido de arte, de lo femenino, del concepto tierra, del concepto patria” y para establecer un diálogo sobre temas sociales relevantes.
En esta obra, la vida y arte de Ana Mendieta trazan el camino para explorar realidades como la migración, las contradicciones dentro del mundo del arte y la violencia patriarcal. Historias paralelas, acontecimientos sin orden cronológico y personajes disímiles confluyen en el escenario, bajo melodías que marcan emociones, evocan la isla de Cuba y resaltan la identidad cultural latinoamericana.
La pieza teatral expone la relación sentimental entre Mendieta y el artista minimalista Carl Andre, con sus concepciones contrapuestas del arte. Sin emitir juicios definitivos, la puesta en escena cuestiona las extrañas circunstancias de la muerte de la artista, donde Andre figura como principal sospechoso de homicidio y luego es absuelto tras pagar una fianza.
“Ana: la gente está mirando la sangre” es una obra conmovedora y necesaria que resuena en el público venezolano y latinoamericano con la invitación de no apartar la mirada a la sangre que sigue siendo derramada. El espectáculo ofrecerá una segunda función este miércoles 16 de abril a las 5:00 p.m. en el Teatro Alberto de Paz y Mateos, en Caracas. Para más información sobre el FITP 2025 visita la página web http://www.fesitpven.com.ve.