Daniel Yegres, director de la película “Alí Primera”, y Eduardo González, protagonista, productor y guionista del largometraje, quien hizo el papel del cantante como adulto joven, fueron entrevistados este viernes en el noticiero Cultura al Día de Alba Ciudad, conducido por Jorge Pinillos, revelando detalles inéditos sobre este largometraje, que está en los cines desde el pasado jueves.
Texto: Alba Ciudad (Luigino Bracci Roa)
Escuche la entrevista:
Yegres, quien es nacido en Coro, cuenta que sus padres eran amigos de Alí Primera, quien estudio Química en la Facultad de Ciencias de la la Universidad Central de Venezuela junto a ellos, estudiantes de Biología en la misma facultad. Entre risas, el director contó que fue concebido en Tierra de Nadie. Como falconiano, su sueño siempre fue el de hacer una película sobre el gran cantor venezolano.
Eduardo González, nacido en Catia, señala que están muy contentos de llevar esta película al público venezolano. Su camino fue muy arduo y están felices de haber completado esta primera fase. “Estamos muy emocionados por saber qué piensa la gente”. Explica que ha sido una película muy dura y exigente, con 3 años de preparación e investigación. Se hizo en tiempo récord, en alrededor de seis o siete meses, con un ejército de 777 personas que trabajaron en ella. La grabación como tal duró seis semanas.
Indica que está en 55 salas del país. “Ayer (jueves), que fue su primer día de estreno, se agotaron las entradas en ciudades enteras. Gente nos llamó para decir que se vendió todo, en otras ciudades nos dijeron que no podía verse hasta el martes”. Indicó que la película va a estar poco tiempo en cine, por lo que sugirió verla lo antes posible.
Dijo que la película tiene muchísimo qué decir y muchísimo para recordar.
El origen de las canciones
En la película se cuenta el origen de varias de las canciones y quiénes son los personajes a los que él canta. “El mundo de Mamá Pancha, el universo de la universidad. Vas a entender a qué se refiere cuando dice ‘Alma Mater’, cuando dice ‘Canción Mansa’. Cuando habla de perder madrugadas por una lata de agua. Vas a ver Falcón en su intensidad, en su aridez. Lo que significa ser una persona con unas condiciones desesperantes, como las que tuvo Alí Primera en su infancia, y cómo es crecer en la rudeza de ese desierto, para convertirse en un hombre como él fue. Por primera vez lo vas a ver y lo vas a comprender”.
“Esta película rescata una historia de todo el país, de tu abuela, de tu hermano. Porque todos nuestros abuelos vienen de otros lados, porque todos tenemos un pasado rural, y ahí nos vamos a reencontrar con ese pasado”.
Humana Cine
La casa productora “Humana Cine” tiene 20 años de trabajo, cuando se les concedió la oportunidad de hacer la película de Alí Primera. Hace 10 años la tenían en proyecto.
Yegres indicó que, con la creación de la Gran Misión Viva Venezuela, se les convoca para la realización de la película de Alí. Con Humana Cine ya habían ganado un premio en el Festival de Cine Latinoamericano y Caribeño en Margarita, con la película “Viernes santo: la película del Chema Saher”, un documental sobre este comandante guerrillero del frente José Leonardo Chirinos, del estado Falcón. También vienen de ganar 7 premios nacionales por la película “Tarkarí de chivo, la cena del crimen”, y también ganaron hace poco una mención especial del jurado en el Festival de San Agustín.
“Esta es la primera obra cinematográfica de la Gran Misión Viva Venezuela, que busca rescatar los valores de lo afirmativo venezolano”, lo que fue un compromiso porque casi todos los promotores de la Gran Misión fueron panitas de Alí.
Producción
Luis Castillo, como director de casting, entrevistó a más de 600 personas para obtener solamente los roles principales. “Las actrices y actores que participan en esta película aportan una cosa tan bella, que hacen que todo florezca. Alrededor de eso se pintó, ¿y quién hizo eso? Mi compadre y hermano querido, Juan Carlos Yegres, director de fotografía, quien logró un lenguaje en la fotografía y en la corrección de color -que también la dirigió él- que acompaña toda la historia”. Señala que eso logró una hermosa continuidad visual. “La fotografía va contando un cuento, eso lo van a ver escena por escena”.
Felia Torres —vestuarista— y Francis Noboa —maquillaje— tuvieron el reto de ambientar, peinar y vestir a los personajes durante las cuatro décadas por las que transcurre la película.
Cuenta Yegres: “Hay una escena donde participa Sandino Primera. Y Sandino hace de su abuelo, el papá de Alí. Sandino ve a Alí pequeño de cuatro años, y a su tío. Eso pasa en la cárcel de Coro, que fue construida en 1927 en el gomecismo, y tuvimos que reproducir exactamente ese ambiente que se vivía en 1944, que es cuando la recreamos. Nos fuimos a Coro con Eduardo, con Juan Carlos, con Humberto, a buscar las fotos que existían en 1944 y los uniformes que usaban los policías, porque el papá de Alí Primera era policía en la cárcel, y esas fotos se las llevamos a la vestuarista para que reprodujera exactamente la cachucha, el traje y tuvimos que conseguir las armas”.
Eduardo González señala: “La película está hecha con la misma estética, valor de producción y con la misma referencia de cualquier plataforma de streaming a nivel mundial. Esta película se le para a cualquier película en Europa o Estados Unidos, y es la misma calidad no sólo con la fotografía; también con el sonido, la postproducción, la mezcla y la música, para que cualquer muchacho de 20 años que ve películas y series en streaming se impresione”.
Señalan que es una película diseñada específicamente para ser vista en cines, en salas de proyección de 22 metros con sonido envolvente surround 5.1.
Efectos visuales
La película tiene numerosos efectos visuales de los que se sienten muy orgullosos.
Narraron cómo hicieron para recrear el concierto “La Canción Bolivariana” por el Bicentenario del Nacimiento de Bolívar, que se realizó en 1983 en el Nuevo Circo de Caracas. Tenían que llenar el Nuevo Circo con 12 mil personas, algo que ya hoy no es posible debido a que la infraestructura del Nuevo Circo, por su edad, ya no permite esa cantidad de asistentes. “Y lo otro era que era imposible controlar y dar indicaciones a tanta gente, darles de comer, tener logística de transporte y baños”.
Daniel decide irse hacia hacia el mundo de los efectos visuales y el VFX. Trabajaron con una empresa especialista, rodaron con gente real, con chroma key (pantalla verde), “luego intervinieron Álvaro Segura y su equipo, con personas que trabajan en la India. Hicieron reproducciones de público (crowd simulation), y en la profundidad tú ves una multitud grandísima”.
Se usaron más de 300 personas para los conciertos.
Se grabó con vuelos de drone el Nuevo Circo de día, se simuló que era de noche, se reconstruyó en 3D y a eso se le metió el público. “Le mostré esto a gente que vive en Europa, y me preguntaron: ¿cómo consiguieron una imagen de dron del Nuevo Circo lleno de gente?, y les dije: ‘eso lo hicimos nosotros, es de mentira'”.
Recomendó estar pendiente del canal Humana Cine en Youtube, donde esperan publicar próximamente detalles de la producción.
Montaje en caliente
El montaje estuvo a cargo de Saude Cevallos, a quien describieron como “la mujer más talentosa en América Latina en edición y montaje”. Ella fue jefa de cátedra de postproducción en la Escuela Internacional de Cine y Televisión de San Antonio de Los Baños, en Cuba. Conformó un equipo conformado por mujeres, a quienes cariñosamente llamaban “las espartanas”.
El montaje se hizo en simultáneo con la película. Explicó que el rodaje “arrancaba a las 6 de la mañana y culminaban a las 6 de la tarde con suerte. El equipo de Media Mánager salía corriendo dos veces al día (al mediodía y en la tarde) y se llevaba ese material a una unidad de premontaje. Al final del día podías tener un premontaje de la escena que habías rodado ese mismo día”.
Contaron que, al terminar el día 36 de rodaje, el equipo hizo una reunión de celebración y chucherías, y Saude, de una manera “un poquito arrojada, haciendo gala de su músculo”, les mostró un montaje preliminar de 3 horas de la película, incluyendo las escenas grabadas el día anterior. Allí empezó la segunda etapa del montaje.
Señala que niños de 12 y 14 años se van a maravillar con la historia de Alí Primera. “Van a haber unas conexiones cerebrales interesantísimas”, e instó a verla en cines lo antes posible.