Por decisión unánime, la obra titulada “La Teoría de la dependencia 50 años después” del economista argentino Claudio Katz se alzó como la ganadora ganador del XII Premio Libertador al Pensamiento Crítico. Así lo anunció el viceministro de Identidad y Diversidad Cultural, Alejandro López, en una rueda de prensa ofrecida este lunes, desde la sede del Instituto de las Artes de la Imagen y el Espacio (Iartes) en Caracas, junto a parte del jurado evaluador, que estuvo conformado por la socióloga María Ángeles Diez (España), la profesora Isabel Monal (Cuba), el investigador y escritor, Reinaldo Bolívar (Venezuela) y el profesor Luis Bonilla (Venezuela).
Texto y foto: Prensa MPPC
De acuerdo con el veredicto, este libro es capaz de ampliar, profundizar y hacer avanzar el conocimiento sobre el imperialismo de nuestra época, brindando una serie de significativas herramientas para enfrentar la guerra contras las fuerzas neoliberales, en el campo ideológico.
La profesora Isabel Monal aseguró que Katz fue capaz de abordar con este libro un tema tan central para la lucha por la independencia plena y la soberanía de Nuestra América, desde la máxima coherencia y rigor teórico y metodológico.
“Esta obra se proyecta más allá del continente, construyendo un marco analítico capaz de develar las estrategias de expansión neocolonizadoras”, añadió.
En esta edición también fueron entregadas menciones honoríficas a las siguientes obras: “Desde abajo, desde arriba” de Paula Klachko y Katu Arkonada; “El verdadero venezolano: Mapa de la identidad nacional” de Luis Britto García, “Semiótica para la emancipación” de Fernando Buen Abad Domínguez, y “Democracia y Derechos Humanos” de Pablo Guadarrama González.
Además, el jurado hizo un reconocimiento especial al escritor italiano Domenico Losurdo, quien habiendo presentado una obra en el 2016, no pudo renovar su participación en 2018, por su fallecimiento.
“Siempre puso su hacer al servicio de la liberación de los pueblos. (…) Nos deja una magna obra que seguirá siendo inspiración para toda nuestra América”, comentó Monal.
Alternativa al pensamiento hegemónico
La socióloga María Ángeles Diez agradeció al Gobierno venezolano la oportunidad de ser miembro del jurado evaluador de este certamen, donde concursaron un total de 86 títulos. Afirmó que este premio es único en el mundo y de suma importancia para estimular el pensamiento emancipador.
“No existen en América Latina y, yo creo que no exagero, si digo que no existe en todo el mundo, un premio de la categoría y de la importancia que tiene este premio Libertador al Pensamiento Crítico. (…) Es el único que se otorga a esa labor de pensamiento crítico enfocado hacia la emancipación; en premiar obras cuyo objetivo fundamental está dirigido a fomentar y promover la creación de una sociedad nueva basada en criterios de justicia, de libertad, de igualdad y sobre todo de paz”, subrayó.
Señaló que este tipo de obras cobran suma relevancia en los tiempos actuales, cuando la región y, en especial, Venezuela son víctimas de una guerra despiadada por parte del imperialismo.
“En estos momentos en que estamos viviendo una agresión de carácter inimaginable por parte del imperialismo, que se ha desarrollado una guerra a mundo en todo el planeta, que adopta todas las formas de guerra anteriores y que desarrolla nuevos instrumentos de sometimiento de los pueblos, este país Venezuela es uno de los países que más sufre ese objetivo del imperialismo priorizado en América Latina. (…) Esa guerra ideológica y cultural es una de las más sangrientas, que tiene consecuencias terribles para los pueblos”, acotó.
Por su parte, Reinaldo Bolívar destacó la importante trayectoria que ha tenido este premio desde su creación en 2005, a cargo del comandante Hugo Chávez, quien ideó esta iniciativa con el fin de estimular un pensamiento alternativo al hegemónico y ponerlo al alcance de las nuevas generaciones.
Resaltó que la convocatoria a esta premio se está haciendo cada vez más universal, púes hasta le fecha se ha contado con la participación de un promedio de 17 países, pese a que el mismo fue interrumpido en 2016, 2017 y 2018 como consecuencia de la guerra económica.
“Se ha constituido como un espacio teórico para el pensamiento emancipador que convoca a los grandes escritores y escritoras para contribuir a las luchas sociales ideológicas que, hoy más que nunca, cuando el imperialismo ataca a nuestros pueblo, intenta retomar el salvajismo del capitalismo, es importante tener herramientas para forjar nuevas generaciones”, enfatizó.