En el marco del II Ciclo Especial de Seminarios denominado “60 años después, ¿en qué estamos y a dónde vamos?, organizado por los Centros de Ecología del Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC) y el Centro Internacional de Ecología Tropical (CIET) a cargo de Jon Paul Rodríguez, se abordó el tema del Cambio Climático en Venezuela.
Texto: Prensa IVIC
El ponente Dr. Carlos Méndez, jefe del Laboratorio de Ecosistemas y Cambio Global y jefe del Centro de Ecología, explicó cómo el país se ha visto afectado por este fenómeno en los últimos 20 años y las posibles implicaciones en los próximos 50 años.
Señaló que efectos que el cambio climático ha provocado en el país se viene evidenciando en distintas áreas vitales para la vida de cualquier ser humano y que de, una u otra forma, vienen a afectar su cotidianidad, ya sea en materia de producción alimenticia o de salud.
Para Méndez y de acuerdo a los estudios realizados en el Laboratorio de Ecosistemas y Cambio Global del IVIC, los efectos también se están evidenciando en el aumento de la temperatura, variabilidad en los ciclos de lluvias, proliferación de enfermedades, baja producción en algunos rubros; así como el aumento en el nivel del mar.
“Desde el IVIC estamos abordando el problema desde dos perspectivas importantes, planteadas dentro de la Convención Marco de Naciones Unidas para el Cambio Climático cómo es la adaptación y mitigación”.
Explicó Méndez que, en el IVIC se realizó el estudio más reciente de los Efectos de Gases de Invernadero, bajo las normas y metodologías del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), cumpliendo con los principios de transparencia, consistencia, coherencia y exactitud en cuatro sectores principales, energía, industria, agricultura y desechos.
Se pudo conocer que con respecto a términos de adaptación, se está buscando
registrar cuáles han sido las estrategias en lo local para impulsar el Plan Nacional de Adaptación, que es parte de lo establecido en el Plan de la Patria; también, se ha participado en la elaboración de la segunda comunicación nacional y se tiene previsto participar en la elaboración de la tercera, con el propósito de actualizar el inventario de Gases de Efecto Invernadero (GEI).
En la ponencia se presentaron los resultados del inventario obtenidos en el 2018, con base en los datos del año 2010, donde se pudieron detectar las oportunidades de mitigación del país y proyectar cuáles serían los aportes que pudiera presentar Venezuela en cuanto a la adaptación y mitigación ante las Naciones Unidas.
“Los resultados son alentadores en cuanto a mitigación e impacto. Hemos registrado los más importantes en las áreas de agricultura, salud, caudal de los ríos, proporcionándonos la base científica y técnica para poder dar soluciones a estos impactos”.
Con lo que viene ocurriendo con el cambio climático en Venezuela, todos los estados están siendo afectados, según su realidad y el aspecto a examinar. Los ubicados en la parte norte, tendrán afectaciones en los caudales de los ríos; en cuanto a la temperatura se reflejará en Zulia y Llanos Occidentales; mientras que la afectación de vegetación o enfermedades trasmitidas por vectores, se evidenciará en el oriente y sur de Venezuela, tomando en cuenta que el efecto del cambio climático es trasversal.
La mano del hombre
El jefe del Centro de Ecología del IVIC explicó que, en los últimos 20 años, se ha agudizado el problema y no se ha podido detener el aumento de la temperatura; por el contrario, se ha incrementado esta tasa, debido a las actividades desarrolladas por el ser humano.
“La emisión de gases de invernadero y los cambios de uso de la tierra tienen mucho que ver con este aumento de la temperatura”, advirtió
Con respecto a las proyecciones arrojadas de los estudios ya realizados, para el año 2100, habrán varias efectos de preocupación global, como episodios metereológicos extremos, mayores amenazas por el aumento de las temperaturas y riesgos e impactos totales globales. Este escenario, en nuestro país, se traduciría en escasez de agua y alimentos, desplazamientos forzados de personas, inundaciones costeras e incremento de la pobreza”, refirió Méndez.
Dónde, cuándo y cómo se iniciará en proceso de seguimiento, vigilancia y control de la afectación de los bosques venezolanos, que últimamente se ha visto seriamente incrementado, poniendo en riesgo pequeñas y grandes reservas de agua para consumo humano. Casos áreas protectoras de los embalses de “Clavellinos y “Turimiquire”, en el estado Sucre. A esto se suma las áreas protectoras de muchos manantiales y riachuelos que abastecen a pequeños poblados. La “palabra de la ciencia” tiene bastante influencia para orientar las acciones pertinentes para el manejo adecuado de ese delicado aspecto.