Los Diablos Danzantes de Corpus Christi de Venezuela ingresaron en diciembre de 2012 a la lista representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad que aprueba la Organización de la Naciones Unidas para la Educación, Ciencia y la Cultura (Unesco).
Texto: AVN
Once cofradías, enraizadas en igual número de comunidades de Venezuela desde hace cerca de cuatrocientos años, conforman esta manifestación cultural sincrética que rinde tributo al Santísimo Sacramento.
La tradición, que mezcla los ritos cristianos con las raíces indias y africanas, dicta que bailan el noveno jueves después del Jueves Santo, integrados a la celebración católica del Corpus Christi, que este año se celebra este jueves 31 de mayo.
Estas son las cofradías que se distribuyen por cinco estados del país:
Diablos Danzantes de Yare
Se celebra en San Francisco de Yare, estado Miranda. Bailan vestidos totalmente de rojo, con rosarios y cruces de palma en la espalda, y grandes y vistosas máscaras. Se dice que la tradición comenzó en 1749, luego de una gran sequía que afectó el Valle de Yare. Fieles hicieron promesas al Santísimo Sacramento para que llegara la lluvia al lugar. Esta cofradía incorpora una mujer en su baile,”La Sayona, señala una información del Ministerio de Turismo.
Diablos de Naiguatá
Estado Vargas. Las máscaras representan en su mayoría a animales marinos. Los danzantes, que el jueves de Corpus Christi salen de cualquier parte de la localidad porque ese día “el diablo anda suelto”, llenan su traje de campanas y sonajeros para anunciar su llegada.
Diablos Danzantes de Ocumare de la Costa
En Aragua. Data del año 1610. Baila dos días en la semana de Corpus Christi. El traje es parte de la ofrenda al Santísimo Sacramento y debe ser nuevo cada año; si no, el promesero no puede bailar. Las máscaras representan a animales. Cada uno lleva una cruz de tela bordada y una de palma bendita, para proteger a los danzantes.
Diablos de Chuao
También en las costas de Aragua. La tradición tiene más de 300 años. Su vestimenta es multicolor y las máscaras son de color negro, blanco y rojo. Llevan enlazado entre los cachos una cinta tricolor. La danza va acompañada del repique del tambor, que tiene atado un cordón de plumas de zamuro llamado chirriador, que produce una vibración mayor y acompaña al cuatro.
Diablos Danzantes de Turiamo
Se dice que son los “diablos exiliados”. En 1957 fueron sacados de sus tierras durante la dictadura de Marcos Pérez Jiménez para la instalación de una base naval. Desde entonces bailan en los sectores 23 de Enero, El Recurso y La Coromoto, de Maracay, en Aragua. Al atuendo le agregan una especie de látigo de cuero con un palo de madera, conocido como “el mandador”.
Diablos de Cuyagua
Tiene la particularidad de permitirles a los danzantes decidir cómo vestirse cada año. La jerarquía de esta cofradía se clasifica en perreros, capataces y diablos. Los primeros son los más viejos en el grupo y van sin traje el día de la celebración ya que son un tipo de acompañantes sagrados. También están en las costas de Aragua.
Diablos Danzantes de Cata
En Aragua. Danzan dos veces al año, el jueves de Corpus Christi y un día festivo que escogen entre todos. Sus máscaras están fabricadas con tela metálica, con los ojos, nariz y boca pegados a la tela. Llevan cintas multicolores en sus cachos y usan capas largas de color. El traje puede ser floreado o estampado.
Diablos Danzantes de Patanemo
En Carabobo. Es una de las cofradías más antiguas. Su origen se remonta a 1721. Se dan un baño de purificación en el río El paso de Belén, como parte del ritual.
Diablos de San Millán
En Carabobo. Su vestuario es sumamente colorido y las máscaras están hechas con alambre moldeable, papel periódico y cintas de colores.
Diablos Danzantes de Tinaquillo
En Cojedes. La tradición data de comienzos de 1900. Dedican siete bailes dominicales consecutivos para honrar al Santísimo Sacramento. Su vestimenta destaca por la dualidad del rojo y negro, se complementa con camisa de flequillos y pantalones de satén. Las máscaras son elaboradas con tela metalizada y se caracterizan por tener rasgos humanos exagerados.
Diablos Danzantes de San Rafael de Orituco
En Guárico. Es la única cofradía donde se toca el cuatro y la tambora a la vez. Los diablos usan trajes rojos y negros, con capas que los cubren desde los hombros hasta las rodillas. Las máscaras son gigantescas con trompas alargadas, de colores llamativos y apariencia maligna. Incorporan a una mujer, que llaman “la diabla”, y durante su baile, coquetea con los otros diablos. Su traje es un vestido floreado de mangas largas y su máscara debe ser redonda.