Con actividades recreativas comenzó la programación del eje infantil de la sexta edición del Festival de Teatro de Caracas 2017, los niños de la gran ciudad, y también los adultos y jóvenes disfrutaron de un domingo diferente propiciado por la Alcaldía de Caracas y Fundarte. Un gran toldo con facilitadores que dictaron talleres de pintura, manualidades y títeres, hasta un espacio amplio preparado para distintos espectáculos formaron parte de lo que por seis años consecutivos ofrecen los organizadores del festival.
Prensa FTC (Texto: Katherine Rodríguez / Fotos: Simón Caicedo)
El Parque Ali Primera fue uno de los sitios oficiales del eje infantil, y los protagonistas, como siempre, fueron los caraqueños. La oportunidad de ofrecer actividades gratuitas que apuntan hacia el disfrute del pueblo es el principal objetivo en esta programación, que sin duda que abre las puertas a diferentes agrupaciones de Venezuela y otros países.
La música, las risas y la alegría abrieron las puertas a primera presentación que dio inicio a las 11:00 am, Cuidado con el televisor, un espectáculo titiritero brincó un mensaje de reflexión a los consentidos de la casa de forma ocurrente y fluida; la receptividad de los niños en cuanto a tal actividad fue a plenitud, las sonrisas y la participación jamás fueron aplacadas. “Los gritos de alegría y la participación en la función fue maravillosa. Ver como mis niños entendieron que deben cuidarse de los programas de televisión y estar conscientes de que captaron la importancia de las actividades recreativas me parece importante”, expresó Sikiu Ramírez, espectadora que desde temprano esperó la presentación.
Seguidamente, Circo Sur, regaló variedad y asombro, con su manifestación El otro circo, sorprendiendo a los caraqueños con malabarismo, trucos de magia, movimientos de ula ula al son de la música, gimnasia de fuerza, acrobacia y un característico presentador que vestía de payaso. Con este abanico de dinamismo, la agrupación logró que las palmas de los adultos, jóvenes y niños no pararan de sonar.
Entre el público que hizo acto de presencia en esta sorprendente puesta en escena, se encontraba Romer Castillo, quien se declaró sorprendido por la variedad de actividades que ofreció la agrupación y además comentó que “el Festival de Teatro de Caracas, sobre todo el teatro en plazas, parques y comunidades es algo extraordinario, pues consolida la cultura venezolana y abre posibilidades al crecimiento personal de los caraqueños que tanto necesitan conocer del arte y dejar atrás estructuras que han dañado a la sociedad, específicamente a los jóvenes”.
La cultura es la muestra de que el artista puede lograr cambios o pensamientos en la vida de las personas, a veces, se cree que los adultos son los únicos capaces de entender lo que el arte quiere trasmitir, pero sin embargo los infantes absorben de alguna manera todo aquello que lo rodea, es por eso que el eje infantil ha trabajado en función de la mejora de las artes escénicas en la capital, tratando de llegar a los corazones de los niños de las comunidades y todos los espacios públicos del Distrito Capital.
Por otra Indira Rodríguez, madre soltera, dispuso de su día de descanso para formar parte de ls actividades del eje infantil, indicando además “que esta programación y las demás han sido de cálidad y han unido al venezolano”
El próximo sábado 29 de abril, las actividades del eje infantil seguirán retumbando con cánticos, presentaciones de mimos y demás presentaciones artisticas que buscan fundamentar principios de conciencia, paz y cultura en la vida de los venezolanos.