Con la intención de contribuir en el nuevo modelo de producción del país y dar a conocer las bondades del circo para la promoción de valores y mejoramiento de la economía, la Red Nacional de Artes Circenses impulsará encadenamiento productivo. Así lo informó William Rivas, impulsor de la Red Nacional de Artes Circenses, entrevistado en el programa El Desayuno, de Venezolana de Televisión.
Texto: AVN
“Buscamos visibilizar nuestro trabajo y poderlo exportar para acabar con la cultura rentista y empezar con nuestra cultura productiva, para lo cual proponemos activar ese motor del encadenamiento productivo sobre cómo producir a favor de nosotros y de todo el país”.
Rivas detalló que el proceso ya está iniciado, para lo cual se han fabricado en el territorio nacional clavas y dos carpas de circo, que serán trasladadas a Maracay, capital del estado Aragua, y San Cristóbal, capital del estado Táchira, para ser puestas en funcionamiento.
Sumado a esto, precisó que realizarán actividades en varios espacios públicos, donde se puedan hacer las actividades de estos movimientos artísticos. “Estamos creando varios circuitos de salas, de carpas, de teatros, de escuelas y de plazas, para el encadenamiento productivo”.
Los planteamientos emanan del I Congreso de Artes Circenses que se realizó el pasado domingo en la Escuela Venezolana de Planificación, en Caracas, en el que se establecieron cuatro mesas de trabajo en las áreas de comunicación, formación, producción y marco jurídico.
En cuanto a la mesa del marco jurídico, Ana Paula González, impulsadora de la Red Nacional de Artes Circenses, detalló que más de 80 personas y 19 colectivos firmaron un manifiesto en el que se plasma la necesidad de aprender cómo gestionar socialmente los espacios artísticos.
Asimismo, manifestó que priorizarán la profesionalización a través de centros superiores de educación, como por ejemplo la Universidad Nacional Experimental de las Artes (Unearte), y activarán convenios internacionales que les permitan adquirir saberes empíricos en espacios de Suramérica, para continuar cultivando los valores del circo.
“Lo más importante es visibilizar el trabajo que ya se está haciendo, porque hay muchas escuelas a nivel nacional que ya están realizando trabajos en las comunidades; somos como educadores, transformamos, hacemos magia, colores, muchas cosas buenas”, afirmó González.