Más lo cautivó el cam- bur- pin- tón del cuatro, que sus estudios sobre la evolución de los seres vivos y su trabajo en la industria farmacéutica. Ángel Martínez, biólogo, hoy convertido en un reconocido cuatrista, nunca imaginó que el instrumento de cuerdas lo atraparía hasta llegar al punto de dejar a un lado su profesión y dedicarse en cuerpo y alma a su ejecución. Desde hace 37 años los acordes del cuatro corren por las venas de Martínez, quien en su época de muchacho se interesaba más por otros estilos musicales que por los ritmos venezolanos, hasta que un día el tema “Curruchá”, de Jesús Sevillano -médico y cantante criollo fundador del Quinteto Contrapunto-, llegó a sus oídos e hizo que cambiará su perspectiva.
Texto: Correo del Orinoco (Patricia Pineda)
“Mi encuentro con el instrumento fue muy sui generis porque escuchaba todo tipo de música menos la tradicional. Me topé con esta canción y quedé encantado, tanto que decidí tocar cuatro”, comentó el músico, quien se desempeña como asesor en la Fundación Vicente Emilio Sojo (Funves).
Con el pasar de los años su pasión por este Bien de Interés Cultural se hizo más intenso, tanto que se dedicó a descifrar los acordes del maestro Fredy Reyna, considerado como uno de los máximos ejecutantes del cuatro en nuestro país. “En todo este tiempo si he dejado de tocar una semana el instrumento ha sido mucho y si sumo todos los días no llegó ni al mes”, dijo.
DECLARATORIA MATERIALIZADA
Sin titubeos, el concertista enfatizó que toda su vida está dedicada al cuatro, condición de la cual no se arrepiente porque le ha permitido valorar sus raíces y su cultura como venezolano: “Desde que me levanto a las 7:00 am hasta que me acuesto, a las 11:00 pm, lo que hago es estudiarlo”.
Además de cultivarse en la práctica del instrumento, Martínez actualmente trabaja en el Funves, junto a otros cuatristas como el maestro Cheo Hurtado, para desarrollar programas y proyectos a propósito de la celebración del año de este instrumento.
Al respecto, señaló que desde la institución musical adelantan una serie de actividades, como la grabación de discos y conciertos, para dar a conocer el instrumento nombrado Bien de Interés Cultural este 2013, declaratoria que no le sorprendió porque, a su juicio, fue la formalización de un hecho que ya era visible.
Entre los tantos proyectos que se planean, el músico mencionó la producción discográfica Tributo a Jacinto Pérez y Fredy Reyna, material que grabó junto a Hurtado en el Centro Nacional del Disco (Cendis).
Asimismo, indicó que se tiene previsto la creación de nuevos métodos para la enseñanza de la ejecución del cuatro y la filmación de videos sobre la importancia del instrumento con el objetivo de compartirlos en las redes sociales y en cada rincón del país: “Queremos que en cada hogar venezolano se escuchen los acordes del cuatro”.
“El impartir lecciones de cuatro es una idea bien ambiciosa, pues queremos que se den de manera particular y también que sea clase obligatoria en las escuelas y para ello sería necesario formar a los maestros(…). Los géneros venezolanos no son tan sencillos, hay que saber tocarlos y conocerlos”, recalcó el cultor.
Martínez notificó que dentro de poco abrirán la convocatoria a un concurso de cuento, cuyas historias deberán estar relacionadas, claro está, con el mencionado bien patrimonial. Precisó que está iniciativa se llevará a cabo en conjunto con el Centro Nacional del Libro (Cenal) y esperan contar con el apoyo de las editoriales del Estado como El Perro y la Rana o Monte Ávila.
Agregó que, de igual manera, trabajan para invitar a un concurso de composición de piezas a ser ejecutadas con el instrumento. El artista detalló que el certamen llevará el nombre de Freddy Reyna, en homenaje al maestro.
EN LA HISTORIA
Ángel Martínez adelantó que entre los meses de julio y agosto de este año iniciarán una investigación sobre la historia del cuatro. Expuso que se hará un estudio bibliográfico profundo, tanto en Venezuela como en España, con la intención de editar un libro con la ayuda del Centro Nacional de Historia (CNH).
Aclaró que en el país europeo las pesquisas se realizarán en el Archivo General de Indias, situado en Sevilla y donde se encuentra información documentada por los españoles durante la época de la colonia sobre el cuatro criollo.
Por otra parte, reveló que han sostenido conversaciones para declarar el día del instrumento, para lo cual se han planteado como fechas el 3 de abril, por el natalicio de Fredy Reyna, o el 30 de septiembre, para recordar un festival organizado por el fallecido cuatrista.
CON SELLO NACIONAL
Para Ángel Martínez las políticas puestas en marcha por la declaratoria del cuatro como Bien de Interés Cultural no sólo giran en torno al trabajo realizado por los cuatristas y la formación, sino también a la fabricación del instrumento.
En una conversación con el Correo del Orinoco, el músico refirió que desde la Fundación Vicente Emilio Sojo se ha pensado en desarrollar talleres para la fabricación del bien, así como en la siembra de árboles como el cedro y el caobo, de los que sale la madera para su elaboración.
Al respecto, explicó que el país tiene un déficit de materia prima para producir el instrumento. “Tenemos problemas con las clavijas, porque aquí no se fabrican, al igual que las cuerdas. Todo el material viene de afuera”, señaló.
Martínez recalcó que entre sus deseos está la posibilidad de que cada pieza con la que se construye un cuatro se fabrique en el país. “Así el instrumento tendría sello 100% venezolano”, expresó. Finalmente, destacó que el trabajo que se hace para difundir el cuatro “es realmente importante y abarca todas las áreas que sean necesarias”.
Apuntó Martínez que aunque se celebra el año del cuatro este 2013, las cultoras y los cultores que se dedican a tocarlo adelantan un plan continuo denominado Cuatro cuerdas y una patria, para que “se mantenga en el tiempo”.