Foto Milangela Galea
Jesús Mujica estuvo entre quienes ingresaron los restos mortales de Armando Reverón y César Rengifo al Panteón Nacional el 10 de mayo, fecha en la que se celebra en Venezuela el Día Nacional del Artista Plástico. Quien conoció al dramaturgo en el año 1974 en la Escuela de Artes Plásticas Aplicadas Cristóbal Rojas, no esconde la satisfacción de haber participado en el traslado de sus restos al camposanto de héroes y heroínas “porque me tocó la dicha ser discípulo de César Rengifo”.
Texto: Prensa MinCultura
Nacido en Caracas en el año 1951, reconoce en el homenajeado su principal motivador hacia la investigación de la memoria histórica de Venezuela.
Reveló que su participación en el evento fue por decisión de la familia de Rengifo, de la que se considera miembro porque “nunca hemos roto esos vínculos” toda vez que “todos estos años hemos estado luchando para que el pensamiento de César Rengifo no se esfume”.
-¿Cómo se conocieron?
“Yo lo conocí en un conflicto en el gobierno de Raúl Leoni (presidente entre 1964 y 1969). Estábamos promoviendo una reforma de sistema curricular, y bueno, acudimos a él. Ese primer contacto permaneció en la vida de César hasta el año 1980 cuando se fue de este planeta y se fue a un nuevo espacio.
Aseveró que el dramaturgo no quería que sus estudiantes fueran un clon suyo. “Lo fundamental es que César formó juventud, formó varias generaciones de actrices, escritores, periodistas y músicos pero fundamentalmente de hombres y mujeres que en la actualidad están desarrollando actividades en diferentes frentes sindicales, frentes campesinos”.
Un documental y un libro
Mujica refirió un documental elaborado en honor a Rengifo, hecho que le valió la cárcel a consecuencia de la represión que caracterizó a la cuarta República.
-¿Cuál fue el documental? ¿quienes lo realizaron?
-Un documental que Pedro Riera, Juan Plaza y mi persona hicimos entre el año 1972 y lo concluimos en 1975. Se llama César Rengifo.
-Usted tuvo conflictos por lo que realizaba y escribía?
-Claro, en el año 1975 yo caí preso por rebelión militar y el material que componía mi expediente era ese documental. Tú no podías tener un libro, un disco de Ali Primera, no podías tener nada porque eso significaba que ibas a pasar varios años de cárcel. De hecho, yo pasé dos años y medio en el Cuartel San Carlos y César Rengifo estuvo preso en un campo de concentración frente a Puerto Páez, en los tiempos de Eleazar López Contreras. Allí contrajo la tuberculosis que lo acompañó toda la vida.
“Hay un libro que escribí yo, bueno, fue César. Son sus testimonios. Y yo lo que hice fue transcribirlo y ambientarlo y han sacado cinco ediciones y la primera fue en el año 81 un año después que falleció”, rememoró de esa edición del Centro de Estudiantes de la Universidad de Los Andes, Facultad de Ciencias, que “seguimos trabajando luego a partir del año 1991”.
El texto, titulado A viva voz y publicado también por Fundarte y el Ipasme “tuve la oportunidad de dárselo al presidente Maduro el día del acto”.
Relacionó, sin mezquindad alguna, a otros pupilos del artista que el 10 de mayo asistieron al majestuoso acto: Rafael Salazar, Silvia Mendoza, Yorlando Conde y Eduardo Mujica entre otros que también representaron al movimiento de los trabajadores y las ligas campesinas.
Miguel Angel Pereira