En el marco de la conmemoración del centenario del natalicio del escritor, guionista y fotógrafo mexicano Juan Rulfo, este martes se llevó a cabo en la Librería del Sur Orlando Araujo, en Caracas, un conversatorio dedicado a resaltar la vida y obra de este insigne escritor y su trascendencia en la literatura latinoamericana.
Texto: Prensa MPPC
La actividad, que inició a partir de las 10:00 de la mañana, estuvo encabezada por el profesor Roberto Hernández Montoya y el coordinador multimedia de la Biblioteca Ayacucho, Jesús León, quienes ofrecieron a los asistentes un recorrido por la narrativa, orígenes y tradiciones culturales presentes en la obra de Rulfo.
Hernández comentó que una de los elementos más característicos de los trabajos realizados por este autor es su capacidad de combinar a la perfección la realidad con la fantasía, logrando atrapar a sus lectores “en un mundo del cual no saldrán más nunca”.
“Las obras de Rulfo no son cuestión de entenderlas como se puede entender un teorema matemático, sino cuestión de sumergirse en ellas. Uno se mete adentro de una realidad con cada libro, el problema es que no sales más nunca, porque es una especie de preparación para la muerte”, expresó.
Asimismo, señaló que, al igual que otras reconocidas figuras de la literatura, como Rómulo Gallegos, Gabriel García Márquez, Guillermo Cabrera Infante y José Lezama Lima, rompió con los paradigmas de la escritura latinoamericana, a través de un discurso fresco y capaz de mostrar la realidad y los secretos de la región.
“Llegaron como una especie de huracán en los años 60 y nos dieron un gran fresco de lo que era América Latina en aquel tiempo y, además, hicieron estallar lo que ya habían preparado otros escritores anteriores”, añadió.
El coordinador multimedia de la Biblioteca Ayacucho, Jesús León, destacó que los textos de Rulfo, pese a su corta extensión, tienen entre sus líneas una profundidad inherente, que a través de la cotidianidad describe la forma de ser no sólo de un pueblo o nación, sino de todo el continente, tal como lo hizo en sus dos obras más reconocidas: El llano en llamas y Pedro Páramo.
“Es un escritor que no es solo profundamente mexicano, sino profundamente latinoamericano, porque la obra de Rulfo, aunque es escasa en cuanto a tamaño, logra dar un panorama global y sumergir a cada uno de su lectores en esa realidad rural mexicana que atraviesa todo el continente y describe cualquier parte de Latinoamérica”, subrayó.
Además, resaltó el lenguaje sucinto y conversacional utilizado por este autor, el cual permite la fácil lectura y la conexión e identificación de sus lectores con la realidad que muestra en cada una de sus líneas.
“Rulfo es muy fácil de leer, pues su lenguaje es prístino, completamente transparente. Cuando uno logra leerlo en conjunto y entiende lo que quiere hacer Rulfo no se queda en esa transparencia, pues es mucho más profundo, como esas aguas que de transparentes no se logra ver el fondo. Hay una profundidad inherente en la obra de Rulfo que solo se comprende cuando te sumerges en ella”, agregó.