Muchos pueden creer que al hablar de joropo se hace referencia exclusiva a la música de los llanos venezolanos. Pero este género musical, proclamado como Patrimonio Cultural de la Nación, recorre cada rincón del país; con distintos sonidos, armonías, instrumentos, bailes y cantos. Los expertos en la materia coinciden en que hay tantos tipos de joropo como pueblos hay en Venezuela. En cada región se han adaptado sonidos particulares que hacen que el género se sienta propio en cada rincón. En general, son cinco categorías principales de joropo, de las que salen el resto de las variantes del tradicional género y baile musical.
Texto: Últimas Noticias (Sofía Balza Marcano)
El joropo llanero es el más conocido. El musicólogo Carlos García asegura que ello se debe a que es el que ha tenido más difusión, incluso a nivel internacional, y que se ha convertido en el “estereotipo joropero”.
Por su parte, Omar Orozco, director de la Escuela Nacional de Danza del Ministerio de Cultura, explica que el joropo de los llanos caracteriza su baile por la relación con las faenas de trabajo en el campo; como el ordeño, el manejo de ganado y el ambiente natural. García apoya la idea diciendo que los pasajes y golpes llaneros son temas de amor, desamor y querencias a la tierra, que por lo general van acompañados por zapateos y pasos fuertes.
Sobre la arena
En la región oriental el cuatro, las maracas y la mandolina se reparten el protagonismo dependiendo del tema. En ciertas zonas de la región, agregan guitarras, bajos o caja (un tipo de tambor).
El baile de joropo en el oriente del país se caracteriza por el desplazamiento de manera circular, con pocas figuras y sin zapateo, con pasos cortos, “como si se estuviera caminando en arena”, dice Orozco.
Del tuy
El joropo central, también conocido como joropo tuyero por haber surgido en las zonas cercanas a la cuenca del Río Tuy, “tiene mucha influencia de lo afro”, dice García. “Se dice que este es el joropo del ‘arpa, maraca y buche’, porque la voz del intérprete juega un rol especial”, agrega. El baile se hace un poco más rápido que en el resto del país, con un zapateo más fuerte y figuras de vuelta y contravuelta.
Como el vals
El joropo andino se caracteriza por tener mucho valseo (paso básico en el que la pareja se toma de las manos y pasea por la pista). “Es muy suave, como todo en la zona. Predominan el violín y la guitarra. En el baile no se zapatea”, indica Orozco.
En el joropo larense, que para muchos es una vertiente y para otros ya puede ser considerado como uno de los tipos principales, la manera de cantar es lo que lo hace único. “Es esencialmente vocal y la mayoría de las veces se hace a dos voces”, recalca García. “No hay un instrumento solista. Lo que resalta es la familia de cuatros; desde el tradicional, hasta los más agudos como el requinto o el tamunanguero”.
El vestuario
Por mucho tiempo se ha pensado que las vestimentas de las mujeres deben ser grandes faldas floreadas y que a los hombres solo se les permite usar el tradicional liquiliqui. Sin embargo, Arianne Velis, investigadora y bailadora de joropo, desmiente esta teoría. “Estamos desmontando los estereotipos creados para los escenarios y los shows de televisión”, expresa.
Velis asegura que se utilizan faldas o vestidos cómodos, “ni muy largos, ni muy cortos”, y que todo va a depender de la región en la que se baile. Por ejemplo, “en el llano los hombres no usan liquiliquis por el calor. Mientras más cómodos, mejor”, dice.
[…] vía Cinco claves sobre el joropo venezolano | Alba Ciudad 96.3 FM. […]