En la Sala José Félix Ribas del Teatro Teresa Carreño, se escenificó este domingo un cálido homenaje a quien fuese desde los años cincuenta y hasta los setenta, uno de los principales divulgadores del folclore nacional. Con 89 años a cuestas, Rafael Montaño, gloria de la música criolla venezolana, recibió con beneplácito los elogios que le hicieron en este acto, donde participaron artistas de la talla de Anahé Torrealba, Edith Salcedo, Álvaro Ramos, Martín Ayala, Virgilio José Tirado (Chusmita) y Víctor Morillo, quien se unió a la actividad declamando Galerón con una negra.
Texto: Ciudad Caracas
Sentado dentro del público, Rafael Montaño se confundió con los espectadores que acudieron al teatro para recordar los tiempos de sus éxitos.
Vestido con un “liqui liqui”, como los que usó durante sus tiempos de éxito, saludó de pie al público cuando fue anunciado por el presentador.
Los organizadores presentaron en primer lugar a Álvaro Ramos y a Martín Ayala, quienes, con el arpa del segundo y las maracas y el “buche” del primero, recordaron los joropos tuyeros nacidos en la zona central del país.
A este dúo lo acompañó un par de parejas de bailadores, quienes mostraron al público cómo se baila este tipo de joropo.
Anunciada como la primera mujer que recorriera el mundo llevando la música criolla, se presentó a Edith Salcedo, “La Negrita Cariñosa”, como la bautizara uno de los primeros animadores de la televisión de la época de los años cincuenta.
En esta ocasión, fue acompañada por el grupo de arpa, cuatro, bajo y maracas, dirigido por el organizador, Chucho Acevedo.
Virgilio José Tirado, quien surgió del programa de Simón Díaz con el apodo de “Chusmita”, se paseó por el joropo llanero, el pasaje y la tonada, dando la oportunidad a Anahé Torrealba, nieta de otra gloria de la música venezolana, Juan Vicente Torrealba.
El homenajeado Rafael Montaño subió al escenario para interpretar varias de las canciones que lo hicieron famoso. Cantó el polo margariteño, el cual dedicó a su amigo Víctor Morillo, Cuando te vas y muchos otros que aplaudieron con furor todos los presentes.
Finalmente, Víctor Morillo, ante la petición del público, recitó uno de sus más conocidos galerones.
Muy merecido homenaje, felicito a los de la iniciativa, faltarìa espacio para hablar de ese extraordinario caballero DON RAFAEL MONTAÑO, y mis recuerdos estàn allì con el, celebro que estè lùcido,. es todo un viaje retornar a los 50 y escuchar su potente voz de tenor. Es la gente que queremos tener como ejemplo para el paìs.