Sin trabajo, no hay valor, dice una máxima de la economía clásica; sin embargo, en la Venezuela asediada, el «cuarto agente económico», es decir, el imperialismo, se ha encargado de dinamitar el valor del trabajo, mientras, paradójicamente, el precio de los productos ascendía rápidamente. ¿Cómo es posible que lo trabajado (el producto) valga más que el trabajo que lo produce (el salario)?Leer más →