Con la presencia de diferentes manifestaciones culturales, incluyendo las Zaragozas y tamunangues del estado Lara, la marioneta gigante de Amalivaca, diferentes pueblos indígenas y las agrupaciones Carota, Ñema y Tajá; la argentina Teresa Parodi, el gran maestro Jesús Sevillano, el grupo Folclórico Palestino de Danza, Virgilio José García Tirado “Chusmita” y los Cardenales del Éxito.
Texto: Alfredo Tamayo
Fotos por Jesús Vargas, Roiner Ross y Javier Campos
El ambiente de fiesta se hizo sentir desde los primeros acordes de la gaita Sentir Zuliano. Con un público variopinto, el concierto para el cierre del Festival Mundial Viva Venezuela mi Patria Querida, poco a poco, fue invitando gente al lugar. Cardenales del Éxito, con su prueba de sonido, empezó a levantar los ánimos del lugar.
Minutos más tarde, un ritual chamánico de la etnia Wayúu y Kariña abrió oficialmente el concierto.
Mientras se iba desarrollando un ritual chamánico en la tarima, el pasacalle Amalivaca empezó su recorrido. Este pasacalle recrea una leyenda indígena venezolana sobre la creación del mundo, el Orinoco y el tiempo.
El público asistente no sabía hacia dónde dirigir la atención. Se estaban dando dos eventos. Uno, en la tarima de la plaza y otro, en las adyacencias del Teatro Catia. La imagen del indígena Amalivaca, con más de 8 metros de altura, fue motivo de curiosidad para los transeúntes por ser un espectáculo artístico que reproduce un relato indígena.
Manifestaciones culturales
El colorido de los Zaragozas del estado Lara, se hizo presente con otra representación, muy similar, del municipio Simón Planas de esta entidad, como son los Santos Inocentes del Divino Niño de la Miel. Para Marco Sarmiento, director del Gabinete de Cultura del estado Lara, estas representaciones en el marco de este Festival representan “el abrazo amoroso de los pueblos, porque la cultura al igual que la educación, ha permitido entonces que nos encontremos, que nos reencontremos y que a vez conozcamos de manera directa, muy sensible y muy sentida lo que son las tradiciones y manifestaciones de diferentes partes del mundo”.
No podía faltar el ritmo del Tamunangue con A calumba bella. El público emocionado pidió otra interpretación. El también presentador del acto, Marco Sarmiento, aprovechó la ocasión para anunciar que las manifestaciones de los Zaragozas y el Tamunangue ya tienen su expediente en la Unesco para ser declarados Patrimonio Cultural de la Humanidad.
El ministro para la cultura, Ernesto Villegas, en plena tarima declaró que es el cierre del primer capítulo de la Gran Misión Viva Venezuela mi Patria Querida. Destacó que estas agrupaciones han logrado no sucumbir a las fuerzas del mercado y a la transculturización. que se han dedicado a cultivar su San Juan, su San Pedro, su Cuatro, su arpa, sus tambores, su música… “Lo que hace que Venezuela sea un pueblo indestructible”, puntualizó el Ministro.
Seguidamente agregó: “Quiero agradecer a todos y todas las que ocuparon esos espacios y convirtieron ese Estadio Monumental en el epicentro de las dinámicas culturales de toda Venezuela. (…) Aquí mismo, en la parroquia Sucre tuvimos actividades con nuestros artistas, cultores y creadores, tanto de Venezuela como del exterior, que nos han venido a acompañar”.
La viceministra para las Artes de la Imagen y el Espacio, Mary Pemjean, destacó que “más allá de los números la emoción es lo más grande, lo cualitativo, diríamos. Lo significativo de que la cultura está más viva que nunca. Creo que ese es el mayor éxito que nos llevamos de este primer capítulo, haber visto 45 mil cultores. Hay agrupaciones que no se habían podido reunir en una tarima y este festival se las dio”.
Carota, Ñema y Tajá
Grupo Folklórico Palestino de Danza
La delegación de Palestina en Venezuela, presentó un acto de danzas en cuya puesta en escena dramatiza lo que es un bombardeo en la Franja de Gaza. El drama y la tragedia de la guerra se hicieron palpables hasta el punto que el público quedó sorprendido por esa representación dentro de la coreografía del baile.
Al preguntarle a los participantes del grupo de baile cómo con tanto dolor pueden representar lo que es la guerra, uno de ellos respondió que precisamente con ese arte llevan por el mundo lo que significa para la humanidad entera la guerra y una forma de hacerlo es precisamente por las artes. Con respecto a Venezuela, expresaron que sienten mucha esperanza y amor. “Sienten que no se quieren ir, que es como un segundo hogar”.
El evento prosiguió al calor de las gaitas de Cardenales del Éxito con la espera de un segundo capítulo para la cultura desde la Misión Viva Venezuela mi Patria Querida.
Jesús Sevillano
Luego le correspondió al maestro Jesús Sevillano con sus 91 años de edad, de adueñarse del escenario. El maestro, fundador del Quinteto Contrapunto, regaló al público asistente lo más granado de su repertorio. Canciones como Criollísima, Flor de Mayo, Negra La Quiero, entre otras, fueron las piezas que despertaron la emoción y los recuerdos del público.
Sevillano, en entrevista después de bajar de la tarima, envió un mensaje a la nuevas generaciones para “que tengan en cuenta que ellos nos van a sustituir a nosotros que estamos viejitos, que se guíen por las cosas nuestras, que la música nuestra es una maravilla, y ya estamos en condición de darle música a otros países del mundo” recalcó.
Teresa Parodi
La cantante argentina, Teresa Parodi , luego de su presentación en este acto de cierre, envió un mensaje a los jóvenes latinoamericanos que están incursionando en las artes de raíz tradicional para que sigan adelante haciendo lo que aman, lo que les apasiona. También expresó que se lleva “una emoción muy hermosa, de un Festival tan bien organizado, donde se ve que la música de Venezuela embellece toda la cultura de América Latina”.
Como me hubiera gustado estar ahí!
Muy buena la nota y excelentes fotos.
Viva Venezuela!