Las autoridades venezolanas continúan en sus labores de investigación sobre los planes golpistas que pretenden llevar a cabo sectores de la derecha con el apoyo externo en el país. De acuerdo con el director del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN), Gustavo González López, ha sido capturado un grupo de personas tras obtenerse pruebas de que estaban organizando acciones de violencia para el día 7 de septiembre, cuando fue convocada una nueva marcha opositora.
Texto: TeleSur
Asimismo, el funcionario advirtió que los “planes que fueron frustrados el 1 de septiembre tienen orden de ejecutarse el próximo 7 de septiembre”, señaló González.
Detalló que Lester Toledo; Juan Carlos Celedón, cabecilla del grupo paramilitar colombiano Bloque Norte; Yorman Barillas y Maglio Meleán han sido solicitados por las autoridades por ser autores intelectuales de los planes golpistas. Asimismo, aseguró que los que pretendían llevar a cabo los hechos de violencia son Yovani Vázquez, Gerónimo González, Manuel González y Joel Méndez.
“En la dirección de los planes desestabilizadores está Álvaro Uribe y directivos de la Asamblea Nacional”, afirmó el funcionario venezolano e insistió que las intenciones de golpe se mantienen en el país.
Tras estas declaraciones, el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) reiteró su llamado a la oposición de este país para que atienda el llamado al diálogo realizado por el presidente Maduro y que cuenta con el respaldo de organismos internacionales como la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR).
En contexto
El pasado viernes, la canciller venezolana, Delcy Rodríguez, presentó al Cuerpo Diplomático acreditado en el país, las pruebas sobre los planes de violencia de sectores de derecha para este 1 de septiembre.
Las evidencias fueron presentadas por el ministro de Interiores, Justicia y Paz, Néstor Reverol, quien en rueda de prensa exhibió dos vídeos, uno en el que se visualizan los campamentos improvisados paramilitares cerca del Palacio de Miraflores y de las rutas de acceso a esta casa de Gobierno.
El otro muestra los actos de violencia de pequeños focos que se quedaron en el este de Caracas para desestabilizar la ciudad tras culminar la concentración opositora.