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El presidente Nicolás Maduro enviará una carta al presidente estadounidense, Barack Obama, en la que pedirá que se detengan las acciones conspirativas de Estados Unidos (EEUU) contra Venezuela. Durante una sesión de trabajo efectuada este viernes en la noche en el Palacio de Miraflores, el Jefe del Estado recordó que se encontrará en abril con su homólogo de EEUU y dijo esperar que para esa fecha “usted haya detenido” las conspiraciones. La misiva contendrá “todos estos detalles, porque es muy importante la comunicación directa”, sentenció.
El Mandatario manifestó esperar que igual que la Administración estadounidense ha admitido el fracaso del bloqueo contra Cuba “reconozca el fracaso de las políticas estadounidenses” para destruir “a la Venezuela bolivariana”.
Acusación directa
Maduro dijo a Obama que “su Gobierno en pleno está conspirando para derrocar al Gobierno legítimo de Venezuela”. Todas las agencias de EEUU, como la DEA y la CIA, aseveró,
“están metidas en un plan para llenar de violencia a Venezuela, para justificar un golpe de Estado” y promover con un escalada de violencia “un golpe de Estado en Venezuela”. De acuerdo con el Presidente “están llegando más allá del límite al que pueden llegar”.
Tal como lo advirtió, “llegará un momento en que será imposible mantener relaciones diplomáticas con su Gobierno”. Lo que hacen funcionarios estadounidenses de buscar líderes de opinión pública y programas de TV para “comprarlos” o buscar empresarios para “cortar cadenas de suministros” es “contrario al mensaje que usted envía y al mensaje que yo respondo”, sentenció.
El Jefe del Estado señaló al vicepresidente estadounidense, Joseph Biden, por presuntamente sostener –durante una reunión con naciones de Petrocaribe– que el Gobierno venezolano sería derrocado y que Petrocaribe iba a desaparecer. El Mandatario igualmente cuestionó las informaciones sobre Venezuela difundidas por The New York Times y aseveró que está dando el visto bueno para un plan contra Venezuela.
Pidió a la población estar alerta y en lucha y argumentó que, de pasar a mayores, “también estaríamos preparados” para lograr la victoria “en el terreno que sea, en el escenario que sea”.
“Bodrio de la ultraderecha”
Maduro rechazó las acusaciones contra el presidente del Parlamento, Diosdado Cabello, por supuestos nexos contra el narcotráfico. Con “este bodrio de la ultraderecha internacional” lo que han hecho “es unirnos más”, porque “estamos defendiendo algo sagrado”.
Expresó que ABC, diario español que difundió las presuntas denuncias de un oficial venezolano que habría sido captado por la DEA, “defendió a Hitler, a Franco, a Mussolini” y “se sienten orgullosos de sus 118 años de fascismo”; consideró que atacan a Cabello porque es un líder imprescindible de la Revolución.
Aseguró que en el mundo hay una campaña “en el campo de la guerra psicológica” para “justificar un golpe de Estado cruento en Venezuela” apoyado por factores imperiales de EEUU. Por el contrario, sostuvo, Venezuela ha recibido el “total y unánime respaldo” de la Celac.
Se ha “iniciado una marcha hacia un intento de derrocamiento” del Gobierno constitucional, pero esa marcha terminará en una derrota militar y electoral, analizó el ministro de Comunas, Elías Jaua.
La canciller Delcy Rodríguez reconoció que gobiernos del Caribe se le plantaron a Estados Unidos para que no saboteara la cumbre de la Celac. Recalcó que en la Cumbre se aprobó un plan común para la erradicación de la pobreza y afirmó que el pueblo venezolano “puede sentirse satisfecho” del Presidente.
Una verdadera comunidad
Al describir los hechos vinculados con la Cumbre de la Celac, Maduro saludó “la valiente decisión del presidente Obama” de buscar las vías para normalizar relaciones con Cuba. Pero enfatizó que una cosa es el Gobierno estadounidense y otra cosa es el poder. Agradeció al Gobierno de Costa Rica “por toda la colaboración” en materia de seguridad.
La ministra de Comunicación e Información, Jacqueline Faria, describió que la Celac es, efectivamente, una comunidad, y resaltó “la capacidad de oírse”, porque hay espacios
de encuentro mundiales en los que las y los participantes no se escuchan. Faria destacó la receptividad del pueblo para con la delegación venezolana y las palabras de aliento y solidaridad expresadas por diversas personas. Los planes que se propone la Celac “lo que hacen es entusiasmarnos cada vez más”.
El Jefe del Estado reiteró –en respuesta a las campañas sobre su sitio de nacimiento– que nació en Caracas. “Me siento orgullosísimo, en verdad, de haber nacido en esta tierra”, subrayó. Tendió de nuevo sus manos al mandatario colombiano, Juan Manuel Santos, para el apoyo que requiera el proceso de paz.
Maduro recordó que la presidencia pro témpore de la Celac está a cargo de Ecuador y se comprometió con los cinco puntos planteados por el mandatario ecuatoriano, Rafael Correa. Propuso construir la Celac de los pueblos, de las mujeres, de la juventud universitaria.